Desde el momento en el que entendemos la repercusión de nuestros actos y comprendemos el origen del problema que tenemos/queremos abordar, es justo cuando estamos preparados para hacerlo.

Y es que más a menudo de lo que creemos, solemos centrarnos en aspectos secundarios al problema de base que tenemos. Esto hace que la consecución de nuestro objetivo se alargue y/o se vea afectada, por lo qu ...

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